Bueno, es algo así. A veces me imagino con una chica y un niño corriendo por la casa. Ya saben, una de esas casas. Y el niño tan pequeño que todavía no esté lleno de nada.
Y luego me pregunto quién voy a ser entonces y si pesaré lo mismo y si tendré una cara parecida a la que ahora tengo. Y me pregunto si la chica será la chica con quien estoy ahora o si tengo que ocultarle que no será ella. Pienso en cosas como esas.
Y también pienso en qué apariencia tendré haciendo el amor entonces y en qué apariencia tendré subiendo unas escaleras, por ejemplo. Y me pregunto cuántas ciudades tendré que abandonar antes y cuántos fracasos voy a tener que tragarme.
¿Y dónde estará este de ahora y dónde estará el de después y dónde estaré yo en medio de todos ellos? ¿Cuánto voy a durar tal y como soy ahora?
Pero después de pensarlo siempre vuelvo a este tiempo. Al tiempo donde estamos acostados. Y ella está sobre mi brazo y lleva tanto tiempo sobre él que ya no lo siento para nada. Está tan dormido que podrían cortármelo ahora mismo. Pero no me muevo porque se está muy a gusto con el brazo debajo de su cuerpo.
Y sigo estando muy a gusto incluso cuando se voltea y noto su respiración en mi cara. Rítmica. Interminable. Interminable significa que no puedo pensar en que un día todo esto se acabe.